Drashur
GEOGRAFIA E HISTORIA
Notas tomadas del Prof. Tenald Hatesby
Decano de Historia de la Universidad de Goranna
Notas tomadas del Prof. Tenald Hatesby
Decano de Historia de la Universidad de Goranna
Como es bien sabido, el subcontinente de Drashur (calishita antiguo Drashur ed-Nobein: El Centro del Mundo) forma parte del continente de Drashur-L’un, pero es considerado por la mayor parte de sus habitantes como un continente aparte.
Limita al norte con los hielos perennes, que se extienden más allá del río Raigthheim, al sur con Timat-Alash (calishita antiguo: La Fuente de Vida), al este con el ya mencionado L’un y al oeste con el Océano de las Ánimas.
[...]
Aunque es mantenido por algunos que la expansión de la raza humana, y la progresiva reducción de los habitantes de las otras razas, se dio a partir de la migración de grupos afincados en la rivera norte del río Jiraimot, el único hecho demostrable hoy día son las progresivas colonizaciones por grupos procedentes de Timat-Alash, que alcanzaron Drashur a través del Estrecho del Reloj. Dicha “marea colonizadora” formaba pequeños grupos familiares y con una vida de carácter seminómada que fueron adentrándose en el noroeste del continente.
Así, en una primera migración fechada a principios de lo que se ha venido a llamar Segunda Era del Sol, los nómadas del sur llegaron hasta las riveras del río Jiertch. Algunos siglos después las progresivas migraciones, acompañadas por un cambio en el clima, empujaron a estos colonos hacia las Llanuras Centrales, quedando sustituidos en el sur del subcontinente (desde los actuales pantanos del delta del río Theraid hasta las cumbres del macizo de Baissnar-Düth) por gentes procedentes de la región central de Timat-Alash. Finalmente, en una tercera migración proveniente del este del Estrecho del Reloj, los nómadas de la primera migración fueron empujados de nuevo hacia el norte mientras que estos colonos, algo más avanzados culturalmente, se hacían con el control de las tierras situadas entre los ríos Jiertch y Jiriom, donde se afincaron formando poblaciones estables y con el paso de los años fundaron la primera ciudad del subcontinente de Drashur: Kiramel.
[...]
No queda históricamente claro el porqué, tras más de dos mil años, en lo que se conoce como la Dinastía de los Cien Reyes, del abandono de la otrora populosa ciudad de Kiramel, aunque existen muchas leyendas al respecto. El hecho es que sus habitantes la abandonaron en un tiempo muy breve y que gran parte de los adelantos y las obras de arte que en ella se habían creado se perdieron durante muchos siglos.
El retroceso fue tan grave que muchos de sus habitantes regresaron a las antiguas prácticas de nomadismo, mientras que los restantes se trasladaron a las ciudades que por aquel entonces comenzaban a florecer a lo largo de la costa. Aunque no existen pruebas fehacientes de ello, he de apuntar a la causa esgrimida por muchos autores antes de mí como la más probable: la peste.
[...]
El actual reino de Gorimer se remonta históricamente a mediados de la Primera Era de la Oscuridad. Tras un periodo en el que los nobles locales guerrearon entre sí, con las dispersas tribus ristaitas y la pequeña ciudad-estado de Nedai, la situación empezó a declinar. Las tierras habían sido descuidadas durante un tiempo excesivo y las fuerzas y tesoros de los distintos bandos habían quedado muy mermados, por lo que, tras una tregua entre los nobles locales de mayor envergadura, se decidió adoptar una forma más racional de saldar sus disputas.
Fue Nedhamian I, un poderoso caballero y fundador de la Primera Dinastía Jiriom, quien, apoyándose en la nobleza de Goranna, logró por vez primera que Gorimer fuera un reino unido y lo suficientemente fuerte como para oponerse a sus enemigos del sur, que mediante la unión entre los diferentes condados rivales había conseguido también una coalición en precario equilibrio que sería el germen del actual estado de Sodai.
Limita al norte con los hielos perennes, que se extienden más allá del río Raigthheim, al sur con Timat-Alash (calishita antiguo: La Fuente de Vida), al este con el ya mencionado L’un y al oeste con el Océano de las Ánimas.
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Aunque es mantenido por algunos que la expansión de la raza humana, y la progresiva reducción de los habitantes de las otras razas, se dio a partir de la migración de grupos afincados en la rivera norte del río Jiraimot, el único hecho demostrable hoy día son las progresivas colonizaciones por grupos procedentes de Timat-Alash, que alcanzaron Drashur a través del Estrecho del Reloj. Dicha “marea colonizadora” formaba pequeños grupos familiares y con una vida de carácter seminómada que fueron adentrándose en el noroeste del continente.
Así, en una primera migración fechada a principios de lo que se ha venido a llamar Segunda Era del Sol, los nómadas del sur llegaron hasta las riveras del río Jiertch. Algunos siglos después las progresivas migraciones, acompañadas por un cambio en el clima, empujaron a estos colonos hacia las Llanuras Centrales, quedando sustituidos en el sur del subcontinente (desde los actuales pantanos del delta del río Theraid hasta las cumbres del macizo de Baissnar-Düth) por gentes procedentes de la región central de Timat-Alash. Finalmente, en una tercera migración proveniente del este del Estrecho del Reloj, los nómadas de la primera migración fueron empujados de nuevo hacia el norte mientras que estos colonos, algo más avanzados culturalmente, se hacían con el control de las tierras situadas entre los ríos Jiertch y Jiriom, donde se afincaron formando poblaciones estables y con el paso de los años fundaron la primera ciudad del subcontinente de Drashur: Kiramel.
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No queda históricamente claro el porqué, tras más de dos mil años, en lo que se conoce como la Dinastía de los Cien Reyes, del abandono de la otrora populosa ciudad de Kiramel, aunque existen muchas leyendas al respecto. El hecho es que sus habitantes la abandonaron en un tiempo muy breve y que gran parte de los adelantos y las obras de arte que en ella se habían creado se perdieron durante muchos siglos.
El retroceso fue tan grave que muchos de sus habitantes regresaron a las antiguas prácticas de nomadismo, mientras que los restantes se trasladaron a las ciudades que por aquel entonces comenzaban a florecer a lo largo de la costa. Aunque no existen pruebas fehacientes de ello, he de apuntar a la causa esgrimida por muchos autores antes de mí como la más probable: la peste.
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El actual reino de Gorimer se remonta históricamente a mediados de la Primera Era de la Oscuridad. Tras un periodo en el que los nobles locales guerrearon entre sí, con las dispersas tribus ristaitas y la pequeña ciudad-estado de Nedai, la situación empezó a declinar. Las tierras habían sido descuidadas durante un tiempo excesivo y las fuerzas y tesoros de los distintos bandos habían quedado muy mermados, por lo que, tras una tregua entre los nobles locales de mayor envergadura, se decidió adoptar una forma más racional de saldar sus disputas.
Fue Nedhamian I, un poderoso caballero y fundador de la Primera Dinastía Jiriom, quien, apoyándose en la nobleza de Goranna, logró por vez primera que Gorimer fuera un reino unido y lo suficientemente fuerte como para oponerse a sus enemigos del sur, que mediante la unión entre los diferentes condados rivales había conseguido también una coalición en precario equilibrio que sería el germen del actual estado de Sodai.
3 comentarios:
Estimado David:
Un saludo desde tu nuevo lugar de expresión. Bien elegido el color, que el 2007 puede verse inundado de verde jade.
Nébulos
Pues nada, bienvenido al apasionante (por decir algo) mundo de las bitacoras!
Muchas gracias a ambos. Esta tarde, si nada se tuerce, añadiré alguna cosilla más.
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